Los inyectores de combustible atomizan el combustible en partículas muy pequeñas, lo que constituye un objetivo de diseño primordial para los sistemas de inyección de combustible diésel. Las pequeñas gotas garantizan que todo el combustible tenga la oportunidad de vaporizarse y participar en el proceso de combustión. Las gotas de líquido restantes más grandes se queman muy mal o se expulsan del motor.
950 °F, 960 °F, 3114, 3116, 613 °C